Una institución financiera es una entidad que proporciona servicios financieros a sus clientes. Es decir, una institución financiera puede ser considerada como un mero intermediario ya que se ubica entre los distintos intervinientes.
Los clientes de una institución financiera son desde las familias hasta los Estados, pasando por las empresas debido a que los servicios que prestan tienen que ver con el dinero que poseen o necesitan los distintos agentes económicos de la sociedad.
Para velar por el buen funcionamiento de las instituciones financieras el Banco Central Europeo y el Banco de España son los organismos encargados de supervisarlas; regulando, vigilando y en caso de que fuera necesario sancionándolas por incumplimiento.
Actualmente los sistemas financieros de los distintos países dividen las instituciones financieras en dos tipos:
- Bancarias: Este tipo de entidad puede captar fondos del público en forma de dinero o de recursos financieros de distinto tipo. Su principal ocupación es la de obtener fondos de agentes con excedentes de capital, para prestarlo a agentes con déficit. Además estas pueden también conceder garantías y avales, emitir dinero electrónico o realizar transferencias bancarias entre otras actividades.
- No bancarias: Pueden realizar las mismas actividades que las anteriores, pero su principal diferencia es que no pueden obtener depósitos del público.
Guiándose por el Banco de España, los consumidores deben seguir una serie de consejos en su relación con los distintos tipos de instituciones financieras:
- Examinar con atención todos los términos del contrato, para comprobar que no existen cláusulas confusas o abusivas.
- Conocer las posibilidades de cancelar la operación antes de la fecha de vencimiento prevista, cuáles serían los procedimientos y qué costes implicarían.
- Verificar que el producto existe y asegurarse de que, una vez realizada la operación, usted será reconocido como titular o propietario del mismo bajo cualquier circunstancia.
- Asegurarse de que las entidades a las que entrega sus ahorros están autorizadas para captar fondos del público, consultando los Registros oficiales del Banco de España y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.