La hipoteca para los funcionarios tiene mejores condiciones por lo general, dadas las características de estos trabajadores. Ampliamos esta información a continuación.
Si eres funcionario, tienes que saber que de forma general, los bancos te ofrecerán unas condiciones más favorecedoras a la hora de solicitar la hipoteca. Ello se debe a tu estabilidad laboral, que es lo que más valoran los bancos cuando tienen que decidir sobre una hipoteca.
No hace falta que tengas un sueldo demasiado elevado para acceder a una financiación alta, porque las posibilidades de que vayas a perder tu empleo son mucho más bajas que las de otros trabajadores y, por lo tanto, para el banco vas a ser considerado como un perfil solvente.
Por otra parte, los funcionarios consiguen tipos de interés más bajos, ya que son muchas las entidades que los demandan y esto hace que para este tipo de trabajadores sea más fácil negociar las condiciones de la hipoteca.
Como venimos comentando, los funcionarios tienen más facilidad a la hora de conseguir una hipoteca con buenas condiciones. Veamos cuáles son algunas de las principales ventajas de las que disfrutan estos empleados públicos:
- Tipos de interés más bajos. Para los bancos, conceder una hipoteca a un funcionario siempre es menos arriesgado que si se trata de otro tipo de trabajador. Por ello, suele prestar el dinero a un tipo de interés menor.
- Menos vinculación. Contar con un funcionario como cliente siempre es interesante para los bancos. Por eso, no suelen vincular la hipoteca a la contratación de ciertos productos (seguro de vida, seguro de protección de pagos, fondos de inversión...) para acceder a bonificaciones, como sí suele ocurrir con otros clientes.
- Menores comisiones. Las comisiones siempre son más bajas en el caso de los funcionarios, e incluso puede darse el caso de que la hipoteca no tenga comisión alguna.
- Mayor financiación. Los bancos pueden ofrecer a los funcionarios una hipoteca cercana al 100%, gracias a su estabilidad laboral.
- Mayor plazo de devolución de la hipoteca. Al resto de clientes, los bancos suelen ofrecerles un plazo máximo de 30 años para devolver la hipoteca. En cambio, a los funcionarios pueden darles un plazo de hasta 40 años en algunos casos.
Por lo general, los bancos suelen ofrecer un préstamo del 80% del valor de tasación o de compraventa de la vivienda, e incluso porcentajes menores, como del 60% en el caso de los autónomos.
Sin embargo, en el caso de los funcionarios, al tener condiciones financieras más favorables, podrá resultar más fácil que el banco estudie un porcentaje de financiación de hasta el 100% en algunos casos.
A nivel orientativo, la recomendación general del Banco de España es que el porcentaje destinado al pago de la hipoteca no supere el 35 % del salario o ingresos mensuales. De esta manera, aun disponiendo de mejores condiciones, el banco tampoco permitirá que un funcionario invierta más del 30 o 35% de su sueldo en pagar la vivienda.
Hasta ahora hemos estado hablando de las hipotecas para los funcionarios que tienen una plaza fija. Pero los funcionarios interinos no cuentan con esta característica, por lo que les falta la principal cualidad que tienen en cuenta los bancos respecto a los funcionarios fijos, que es la estabilidad laboral.
Por ello, para los bancos no es tan interesante ofrecer una hipoteca a un funcionario interino como a uno fijo. Razón por la cual, las condiciones de la hipoteca no serán tan buenas para estos otros empleados públicos.
Sin embargo, los funcionarios interinos siguen teniendo ciertas ventajas al contratar una hipoteca, en comparación con el resto de los trabajadores.
Si eres funcionario y estás pensando en solicitar una hipoteca, una a tipo fijo te ofrecerá un tipo de interés constante durante toda la vida de la operación. No dudes en comparar las diferentes opciones de hipotecas fijas con iAhorro, para descubrir la que mejor se ajuste a ti.