En el caso de los préstamos hipotecarios a tipo fijo tienen la característica de que el cliente paga siempre la misma cuota mensual acordada con su entidad bancaria. Esta cuota no depende en ningún índice de referencia como el euríbor para las hipotecas variables.
En todos los créditos a tipo fijo se aplica el mismo tipo de interés durante toda la vida del préstamo, la cuota a pagar mensualmente no varía. La entidad bancaria ofrece al cliente un préstamo de interés fijo, este interés no depende de ningún índice de referencia, por lo tanto las cuotas mensuales no aumentan ni disminuyen, no se ven afectadas a causa de los cambios en los mercados financieros.
En el caso de las hipotecas a interés fijo son recomendables estos casos:
- Cuando seamos reacios al riesgo.
- Cuando haya expectativas de que vayan a subir los tipos de interés de la economía.
- En el caso de que el plazo de la hipoteca sea corto.
Beneficios de una hipoteca a interés fijo:
- Se aplica el mismo tipo de interés durante toda la vida del préstamo.
- La cuota mensual siempre es la misma, nos proporciona tranquilidad y seguridad ante posibles subidas del euríbor.
- Las cuotas mensuales de una variable pueden llegar a ser elevadas en comparación a la de interés fijo.
Contras de una hipoteca a interés fijo:
- El tipo de interés suele ser más alto que el de una hipoteca variable.
- El plazo máximo de contratación suele ser menor que el de una hipoteca variable.
- Al ser menos tiempo las cuotas mensuales suelen ser más altas que la hipoteca variable.
TIN: Las hipotecas a interés fijo se componen de un tipo de interés nominal (porcentaje fijo) que se pacta como concepto de pago por el dinero prestado. Refleja el pago de intereses por el cambio del valor del dinero en un periodo de tiempo.
TAE: La tasa Anual equivalente es un término financiero resultado de una fórmula que incorpora el tipo de interés nominal (TIN), las comisiones y el plazo de la operación.