La cédula urbanística es un documento administrativo, expedido por el área de urbanismo del Ayuntamiento, en el que se reflejan las características y régimen urbanístico en el que está un determinado inmueble, solar, finca o parcela.
El documento tan solo tiene un carácter informativo. Sencillamente, es un certificado de las circunstancias en las que se encuentra la finca y si cumple con las exigencias de la normativa en materia de urbanismo. Concretamente, informa sobre la ubicación, dimensiones, lindes, forma, terreno, clasificación del suelo, servicios, condiciones de colindancia, cumplimiento de las cargas, circunstancias jurídicas y datos de carácter registral.
Es útil para saber si es posible construir en un terreno y qué tipo de construcción puede llevarse a cabo, dado que es preciso conocer en qué circunstancias se encuentra. Del mismo modo, cuando se adquiere una vivienda de obra nueva, es común solicitar la cédula urbanística para comprobar si la construcción cumple con la normativa.
En todo caso, aunque no se trate de una adquisición de obra nueva, este documento suele ser necesario en toda operación de compraventa, junto con el resto de la documentación del inmueble. De este modo, el comprador tiene constancia de que el inmueble cumple con las condiciones que marca la legalidad vigente.
Para solicitar la cédula urbanística es necesario acudir al organismo competente dentro de la localidad en la que se encuentra ubicado el inmueble (la Concejalía de Urbanismo u órgano análogo), presentar el formulario normalizado junto con la documentación requerida y se expedirá en un plazo de entre 15 y 30 días.