La inflación por encima del 10% y la subida de un 0,5% de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) en julio hacían presagiar que iba a ser en agosto cuando el euríbor rompería la barrera del 1%. Y así ha sido. Tras terminar el mes pasado en un 0,992%, el euríbor ha cerrado agosto de 2022 en un 1,25% un valor que ya es el más alto en una década, concretamente, desde mayo de 2012.
Además, la subida interanual que el euríbor ha marcado en los ocho meses que llevamos de 2022 es la más alta vista en un ejercicio completo, ya que supera los 1,72 puntos porcentuales entre el dato de enero de 2022 (-0,477%) y el actual. “Esto es algo totalmente anómalo para el euríbor, cuyos valores no suelen variar más de medio punto en todo un año”, explica el director de Hipotecas de iAhorro, Simone Colombelli, que agrega que “estamos ante un año en el que estamos viviendo muchos cambios en el mercado hipotecario”.
Además, si comparamos el dato de este mes con el de hace justo un año, la subida que ha experimentado el euríbor ha sido de algo más del 350%: del -0,498% al 1,25%. Incluso, los datos diarios registrados en los últimos días han llegado a superar el 1,5%, concretamente el lunes 29 de agosto alcanzó el 1,612%, el martes día 30 se situó en el 1,758% y el miércoles 31 volvió a subir hasta el 1,778%, el valor diario más alto anotado por el euríbor desde el 25 de enero de 2012.
Esta situación era imposible de pronosticar. En 2021, el índice de referencia de las hipotecas variables marcó sus mínimos históricos, situándose por debajo del -0,5%. Pero el panorama macroeconómico vivido a partir de febrero, cuando comenzó una guerra entre Ucrania y Rusia más extensa de lo esperado (ya van 6 meses de conflicto), ha propiciado un desmadre en los valores del euríbor. No obstante, Colombelli asegura que “no hay que alarmarse con esta situación, simplemente volvemos a la normalidad; lo que no era normal fue lo vivido hace un año”.
¿Podría acabar el euríbor en el 2% este año?
“Si todo sigue igual, añadiendo las sucesivas subidas de los tipos de interés por parte Banco Central Europeo (BCE), lo más probable es que el euríbor siga disparado”, dice el portavoz de iAhorro. Precisamente, desde el comparador y asesor hipotecario hemos realizado una estimación de cómo podría terminar el euríbor este año. Por un lado, si tenemos en cuenta la variación de sus datos desde enero hasta ahora, vemos que la subida media del euríbor se sitúa en 0,2 puntos cada mes, por lo que el 2022 podría acabar con este indicador en torno al 2%.
No obstante, Colombelli asegura que “si vemos la tendencia de otros años, es probable que en el último trimestre el euríbor modere un poco su crecimiento, ya que no suele crecer mucho en estos meses”. Para intentar hacer entonces una estimación algo más ajustada a esa realidad, desde iAhorro hemos cogido la variación media de los últimos tres meses, desde junio, que es de poco más de una décima al mes. De este modo, el 2022 podría cerrar con un euríbor cercano al 1,6%.
En cualquiera de los anteriores supuestos, el euríbor seguiría al alza, algo que, explica el director de Hipotecas de iAhorro, “afectará directamente a quienes ya tengan firmada una hipoteca variable”. ¿El motivo? La cuota mensual de un préstamo variable seguirá subiendo cada vez que toque hacer su revisión.
La cuota sigue disparada: hasta 2.800 euros más al año
Si la revisión es anual, que es lo más común en estas situaciones, para saber cuánto pagarían de más los hipotecados cuando les toque hacerla, hay que fijarse en cómo estaba el euríbor justo un año antes. Por ejemplo, si la revisión la tuvieran que hacer este mes de agosto, el dato de referencia que habría que coger para hacer los cálculos sería el -0,498% de agosto de 2021.
De esta forma, con el euríbor ahora en un 1,25%, quien tenga contratada una hipoteca variable a 30 años de 150.000 euros y con un diferencial del 0,99% + euríbor verá cómo la cuota de su hipoteca aumenta 120,03 euros, es decir, pasaría de pagar 448,26 euros al mes a abonar 568,29 euros a partir de esta revisión. Esto supondría un aumento de 1.440,36 euros anuales.
No obstante, si la cuantía del préstamo hipotecario ascendiera a los 300.000 euros, con las mismas condiciones, es decir, con un plazo de amortización de 30 años y un diferencial del 0,99% + euríbor, la subida en la cuota sería de 240,06 euros al mes, por lo que pasaría de pagar 896,52 euros a abonar por la hipoteca 1.136,58 euros mensuales. En este caso, el incremento anual sería de 2.880,72 euros.
La hipoteca mixta, más atractiva que la fija o la variable
Para aquellas personas que ahora estén buscando una hipoteca, la tendencia va a seguir como hasta ahora: el diferencial de las hipotecas variables que ofrecerán los bancos va a ser estable e incluso podría seguir bajando algo más.
“Ya nos estamos encontrando hipotecas variables con diferenciales de 0,5% + euríbor para los perfiles más solventes”, comenta Colombelli. Por otro lado, las hipotecas fijas han experimentado “subidas generalizadas” y es probable que sigan subiendo: “Estábamos en el 2-2,5% y es posible que en algunos casos lleguen o incluso superen el 3%”, dice el portavoz de iAhorro, que también aconseja que “si fuera para mí, ahora no firmaría un préstamo a tipo fijo salvo que me ofreciera unas condiciones muy buenas. Entonces, si tuviera que elegir entre fija, variable y mixta me quedaría con un préstamo a tipo mixto”.
¿Entonces, por qué no despega la hipoteca mixta? Colombelli asegura que “la tendencia al alza de las hipotecas mixtas es clara, pero el mundo bancario va muy lento”. Todavía no hay datos reales sobre a qué tipo de interés medio se está firmando una hipoteca mixta en España debido a que el mercado hipotecario va “con tres meses de retraso, es decir, que pasan tres meses desde la elección hasta la firma de la hipoteca”, si nos basamos en las ofertas generales de los bancos, para una hipoteca a 30 años el interés del tramo fijo puede estar unas cuatro décimas por debajo en la hipoteca mixta que en la hipoteca fija. Eso sí, para contar con cifras más certeras, habrá que esperar al último trimestre del año.
Lo que sí se puede ver en las ofertas de los bancos, es que “el tramo que se rige por un tipo fijo (los primeros 7-10 años) es más competitivo que en una hipoteca fija 100% y, además, si cuando llegues al tramo variable quieres cambiarte de hipoteca por la situación del euríbor, podrás hacerlo sin problema”.
Nueva apuesta: la subrogación de variable a variable
El momento ideal para hacer una subrogación de una hipoteca variable a una fija se dio hace unos meses. Ahora, “en función de la operación y, sobre todo, del perfil del cliente, los bancos también pueden hacer buenas ofertas, aunque no tan buenas como las de meses atrás”, declara Colombelli. ¿Qué les diría a los hipotecados que quieren cambiarse? El experto en hipotecas responde que “la clave está en comparar todas las ofertas del mercado y lo mejor es que se dejen asesorar por expertos como los que tenemos en iAhorro”.
Colombelli también agrega algo importante para aquellos que no estén conformes con su hipoteca actual: “Si quieres cambiarte porque consideras que tu hipoteca es muy mala respecto a lo que hay en el mercado y tienes una variable con un diferencial muy alto, también puedes cambiarla por otra variable, ya que ahora se pueden encontrar incluso diferenciales en torno a 0,5% o 0,6%; y cuando las ofertas de fija sean mejores podrás volver a subrogarte; hacer una subrogación no es algo común en España, pero en otros países de Europa o en el Reino Unido sí lo es”.