Si te preguntas cómo ahorrar para comprar una casa, en este post te ofrecemos las claves.
Básicamente, una casa puede comprarse al contado u obteniendo financiación a través de una hipoteca. No obstante, sea cual sea el escenario, deberás contar con un fondo de dinero. Pero, ¿a cuánto asciende esta cantidad y cuáles son los métodos para constituirla? Precisamente es lo que vamos a tratar a continuación.
¿Cuánto es necesario ahorrar para comprar una casa?
Por supuesto, si no tienes intención de solicitar una hipoteca, el ahorro necesario para comprar una casa es la totalidad de su precio más los gastos e impuestos asociados. Pero esta fórmula suele descartarse porque llevaría mucho tiempo ahorrar tales cantidades.
En todo caso, a pesar de que financies la compra de una casa mediante un préstamo hipotecario, sigue siendo necesario que cuentes con unos ahorros.
En principio, las entidades bancarias no suelen prestar más del 80% del valor de tasación del inmueble. Si no se trata de tu vivienda habitual, sino una segunda residencia o una casa para alquilar, lo más probable es que no te presten más del 70% de su valor de tasación.
Así pues, la primera cifra que tienes que tener en mente al establecer un plan de ahorro para comprar una casa es, cómo mínimo, entre el 20% o el 30% del valor del inmueble. Cómo todavía no sabes qué casa vas a comprar ni su valor, deberás hacer estimaciones según el precio del mercado en la zona en la que te gustaría vivir.
Además, el ahorro necesario para comprar una casa también debe incluir los gastos de formalización de la compraventa y los impuestos. Se estima que estos gastos pueden ascender a un 10% del valor del inmueble.
Con lo cual, ya hemos respondido a la pregunta sobre cuánto ahorrar para comprar una casa: lo ideal sería un 30% o un 35% del valor de tasación, suponiendo que vaya a ser tu vivienda adicional.
Los mejores métodos de ahorro para comprar una casa
En el apartado anterior hemos expuesto cómo calcular la cifra objetivo. Ahora, debes completar tu plan de ahorro para comprar una casa determinando las aportaciones mensuales que puedes realizar, el tiempo que tardarás y los instrumentos financieros que pueden ayudarte.
Trabaja con tu presupuesto
Tu presupuesto personal refleja los ingresos y los gastos. La idea es que optimices estas variables para aumentar la prima de ahorro y, de esta forma, reducir el tiempo objetivo.
El primer método para ajustar tu presupuesto es bastante obvio: detectar las partidas de gastos que pueden ser reducidas. Reduciendo gastos aumentarás tu prima de ahorro. Sin embargo, no debes olvidar que también tienes la opción de trabajar sobre los ingresos.
Una de las mejores formas de ahorrar para conseguir una casa es comenzar a gestionar las deudas. Al ir reduciendo deuda, ganarás potencial de ahorro. Puedes comenzar con las deudas que más intereses están generando.
Abrir una cuenta de ahorro
Anteriormente, había un producto financiero específico de ahorro para comprar una casa: las cuentas de ahorro vivienda. Este tipo de cuentas ofrecían una remuneración por el saldo medio y, además, las cantidades aportadas estaban sujetas a deducción fiscal.
Pese a que, en 2013 dejaron de funcionar tras la supresión de sus incentivos fiscales por parte del Gobierno, la idea subyacente sigue siendo útil: si tienes contratada una cuenta de ahorro para comprar una casa en el banco, tendrás mejor acceso al préstamo hipotecario.
No tienes incentivos fiscales, pero la entidad bancaria te sigue ofreciendo intereses por el dinero que mantengas en la cuenta. Además, es un buen mecanismo para demostrar solvencia y capacidad de ahorro.
Otra de las ventajas de contratar una cuenta de ahorro es que separas el ahorro para comprar una casa de las gestiones del día a día que llevas a cabo en tus cuentas corrientes.
Entonces te podemos ayudar
Contratar un depósito bancario
Un depósito a plazo fijo es un producto parecido a las cuentas de ahorro, con la diferencia en que el dinero depositado no lo tienes disponible hasta el vencimiento.
De hecho, una cuenta de ahorro para comprar una casa es cómo un depósito bancario “a la vista” (en el que los fondos están completamente disponibles). Como contrapartida por dejar bloqueada esta liquidez, el banco te ofrece mayores intereses.
Puedes comenzar abriendo una cuenta de ahorro. En cualquier momento, tienes la opción de destinar parte del saldo a un depósito bancario. Cuanto mayor sea el plazo de vencimiento del depósito, mayor interés tendrá (como norma general).
Pero la cuestión principal es que estás fortaleciendo la relación con tu banco. Por otra parte, te aseguras que no puedes utilizar para otros fines el ahorro destinado a comprar una casa.
Instrumentos de renta fija
Entre los mejores métodos de ahorro para comprar una casa no incluimos las inversiones financieras debido a:
-La seguridad: ni las cuentas corrientes ni los depósitos bancarios cotizan en un mercado financiero. Por lo tanto, no existe la posibilidad de que tu ahorro para comprar una casa sufra una depreciación. Además, el dinero está protegido por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).
-La sencillez: ambos son productos financieros fáciles de entender y de contratar. Solo tienes que ver las ofertas de los bancos y leer las fichas del producto.
-La estrategia: hemos dado preferencia a los productos típicos bancarios pensando en la posibilidad de conseguir mejores condiciones para una hipoteca. Si tienes contratados productos con el banco, tendrás una mejor valoración como cliente y te será más fácil acceder a la financiación.
En todo caso, también tienes a tu alcance la posibilidad de llevar a cabo otro tipo de inversiones que generen un mayor rendimiento. Entre ellos, los instrumentos de renta fija son activos más conservadores y pueden encajar tu plan de ahorro.
En todo caso, es posible que necesites la colaboración de un asesor hipotecario para darte indicaciones sobre cómo ahorrar para comprar una casa.
